Jon es un artista autodidacta hawaiano, fiel a la belleza natural de O’ahu, Hawai, la cual aprendió a conocer, amar, apreciar y respetar, formando los cimientos de su fascinación por el mundo natural y salvaje, que influye profundamente e impulsa su obra actual.
Su obra es una imaginación surrealista de las maravillas y combinaciones ilimitadas de la naturaleza. Nuevas criaturas y simbiosis surgen en sus óleos cuidadosamente representados, a través de la metáfora y la alegoría.
Ching logra un equilibrio entre la textura y el color en sus obras, dando como resultado, criaturas fantásticas que se confunden entre lo realista y lo surrealista proponiendo un ecosistema mágico con relaciones simbióticas entre la flora y la fauna.
“Me inspira la visión del mundo de muchas culturas indígenas que veneran el mundo natural y ven a Dios en todos los aspectos de nuestro mundo vivo”, explica . “Creo que esa perspectiva es clave para sus sociedades sostenibles y que debe volver a despertarse en nuestras sociedades colonizadas”.
“Mis criaturas más surrealistas, en las que la línea entre la flora y la fauna se difumina, son en parte mi intento de representar algo de esta magia invisible”, escribe.
“Al situarlas en un entorno realista entre especies con las que estamos familiarizados, las estoy imaginando en el mundo real. Tal vez, si miramos lo suficientemente cerca o durante el tiempo suficiente, los vislumbremos y mi obra deje de parecer surrealista”.
Si os ha gustado el trabajo de Jon Ching no os quedéis con las ganas de conocer mas de su obra visitando su web.