Los días 6 y 9 de Agosto de 1945 fueron unos días claves para el devenir de la Segunda Guerra Mundial. Esos días se lanzaron, en un hecho sin precedentes, las bombas nucleares sobre Hiroshima y Nagasaki. Unos acontecimientos que pondrían el punto y final a la gran guerra.
Las explosiones nucleares tuvieron unos efectos devastadores en las dos ciudades. Se estima que 140.000 personas murieron en Hiroshima, y cerca de 80.000 en Nagasaki. La gran mayoría falleció debido a las explosiones, pero alrededor de un 15% de las víctimas murieron días después debido al envenenamiento por la radiación.
Casi un mes después fueron tomadas estas fotografías, mostrando un paisaje desolador y la vida de las pocas personas que sobrevivieron.