En lienzos redondos, la artista Chilena, residente en Nueva York, Alonsa Guevara, dibuja detalladamente jugosas y provocativas frutas tropicales, rebanadas por la mitad.
Gran parte de su inspiración proviene de lo que vivió cuando pequeña, en la selva tropical ecuatoriana, en donde creció rodeada de paisajes tropicales, frutas frescas y una diversidad inmensa de vida silvestre.
Sus pinturas rozan la delgada línea entre la fantasía y la realidad, capturan de una manera tan natural y realista cada vena fibrosa de la fruta, cada semilla, cada detalle que realmente llega a confundirnos, hace que se nos haga agua la boca y hasta pensemos darle un mordisco.
“Decidí pintar los frutos cortados, revelando su interior, recreando y representando todos los increíbles patrones, semillas e infinita información que llevan, que mucha gente da por sentado.” Resalta Alonsa.
En el 2014 empezó la fascinación de Alonsa por dibujar frutas, a su vez que recordaba en su niñez y su adolescencia, con el fin de poder crear una obra universal.
“Inmediatamente pensé en las frutas; están en todas partes y han estado presentes como parte esencial de la evolución y como símbolos a lo largo de la historia de la humanidad” Recuerda la artista.
Alonsa Guevara ha creado una amplia serie con dibujos de frutas que van desde lienzos pequeños con diámetros desde los 4 cm, hasta los 76 cm, considera que su obra representa el deseo y la fertilidad, además de la muerte y la decadencia.
“Estos frutos de la tierra pueden ser deliciosos o envenenados, jugosos o podridos, reales o imaginarios, y no importa el tipo, el objetivo de cada una es despertar una respuesta sensorial”. Declara Alonsa.
