Los nuevos óleos de Jon Ching, a diferencia de las anteriores obras en las que creaba extrañas criaturas mezclando la flora y la fauna del planeta, ahora también mezclan la flora y la fauna, pero esta vez con brillantes y lujosas gemas.
Desde hace poco tiempo, Ching empezó a crear lo que describe como composiciones “más tranquilas”, en las que se aleja de los retratos temáticos centrándose en la enigmática maravilla de la naturaleza en su conjunto. Los paisajes y los detalles del mundo animal cobran protagonismo y a veces rozan la ilusión óptica.
Gemas y especies incomprendidas en los nuevos óleos de Jon Ching
Jon Ching es reconocido por su capacidad para combinar elementos aparentemente dispares en sus obras de arte. Su enfoque innovador ha llevado a la creación de una serie de piezas donde las gemas y los animales se funden en una simbiosis visualmente cautivadora. Esta fusión representa la conexión entre la belleza natural y la creación humana, uniendo dos mundos en un solo lienzo.
Las fusiones de gemas y animales de Jon Ching tienen el poder de cautivar a los espectadores y despertar emociones profundas. La combinación de la belleza natural y la opulencia de las gemas crea una tensión visual que atrae nuestra atención y nos invita a contemplar la relación entre lo terrenal y lo celestial. Estas obras nos transportan a un mundo mágico donde los límites entre la realidad y la fantasía se desvanecen, dejándonos con una sensación de asombro y maravilla.
Para lograr esta fusión única, Jon Ching emplea una meticulosa técnica de pintura en óleo. Comienza con un estudio detallado de la anatomía y las características de los animales, asegurándose de capturar su esencia y su expresividad. Luego, con maestría, incorpora gemas y piedras preciosas en la imagen, utilizando tonos y texturas para simbolizar su brillo y resplandor. El resultado final es una obra que equilibra armoniosamente la fuerza y la delicadeza, lo orgánico y lo inorgánico. Podéis ver más de su obra en su web.
