La pintora Laurie Lipton se ha inspirado en las características básicas de las figuras religiosas de la Escuela Flamenca, las cuales se caracterizan por ser realistas y muy minuciosas en los detalles, es un tipo de obra que nace para ser adquirida por la burguesía por ser un medio a través del cual se puede plasmar la belleza de las cosas de forma material. Sin embargo, aunque Laurie estudio todas estas bases del arte no fue sino mientras viajaba por Europa como estudiante, que empezó a desarrollar su particular técnica de dibujo.
Es una forma loca de dibujar, pero el detalle y la luminosidad resultantes merecen todo el esfuerzo. Mis dibujos tardan más en crearse que un cuadro de igual tamaño y detalle
¿Por qué la pintora Laurie Lipton escogió el blanco y el negro para sus pinturas?
Laurie pasaba horas enteras sentada en la biblioteca copiando a Durero, Memling, Van Eyck, Goya y Rembrandt, además de admirar la fotografía de Diane Arbus que fue gran parte de su inspiración por el uso del blanco y negro que llegó a lo más profundo del alma de la artista. “El blanco y el negro es el color de las fotografías antiguas y de los programas antiguos de televisión… es el color de los fantasmas, de la nostalgia, del paso del tiempo, de la memoria y de la locura. El blanco y negro me dolía. Me di cuenta de que era perfecto para las imágenes de mi obra”.
Ademas de escoger su inamovible paleta de colores, otro punto importante que hace única su obra, es su experiencia cuando fue a la universidad pues todo era arte abstracto y conceptual y sus profesores le decían que el arte figurativo había pasado de moda en la Edad Media, que tenía que encontrar otras formas de expresarse, sin embargo, lo abstracto como salpicaduras de pintura en un lienzo y figuras sin sentido no eran lo suyo. Laurie Lipton quiso crear crear algo nuevo, algo nunca antes visto pero que sabía se estaba creando en su cerebro, podeis juzgar vosotros mismos observando toda su obra que se encuentra en su web y en Instagram.