La madrileña Willy Ollero tiene un ‘superpoder’, es capaz de trasladarnos a otra época y lugar a golpe de collage ilustrados.
Esta arquitecta e ilustradora domina el recorte y las letras con la destreza del orfebre que esculpe en plata.
Compone a partir de cosas cotidianas, de canciones, de conversaciones de la calle o de anuncios de televisión y le confiere un toque poético y de fina ironía. ¿El resultado? Una obra que rebosa sensibilidad, naturalidad y brillantez tanto por sus infinitas líneas como por sus evocadoras palabras. Pasen y vean.