Caminando por la calle del Museo de Bellas Artes de Montreal, os podéis encontrar con un largo suelo de arena movediza, formado por líneas de tono arenoso, que se ondea a lo largo de la calle creando un camino de ilusión óptica que nos hace creer que caminamos por un desierto o una playa.
Para fortalecer la ilusión, circunferencias de cromo se posan a través del camino con el fin de resaltar el movimiento de estas “arenas” y con el objetivo de reflejar la arquitectura periférica y los modelos de ondulación en el suelo.
Dunas en movimiento, hace parte de la exposición “De África a las Américas: Picasso cara a cara, pasado y presente” del Museo de Bellas Artes de Montreal y fue elegida después de una convocatoria anual para instalar una obra de arte a gran escala en la Avenida del Museo.
Esta obra ha utilizado el método de la anamorfosis, que busca distorsionar la percepción al ver un objeto según el lugar desde donde se le mire, para hacerlo posible se invirtieron 50.000 dólares y 4 artistas para hacerlo real.
Este proyecto fue realizado en el 2018 por la firma de arquitectura canadiense NÓS (web) que impulsado por su espíritu contemporáneo, crea obras únicas que generan experiencias relevantes y asombrosas para quienes se relacionan con ellas.
Estos temas nos encantan, ¿y a vosotros? si os gustan las ilusiones ópticas, os compartimos este otro articulo que os hará flipar: La mayor ilusión anamórfica del mundo.
